El grupo de gobierno (SI, PSOE, PP y Cs) hace balance del primer año de gestión tras la moción de censura y acusa a González de dejar una deuda que "lastra" el presupuesto de 2018
Un
año después de haber presentado la moción de censura que desbancó
del sillón de la Alcaldía al nacionalista Francisco González (CC),
el actual mandatario de Icod de los Vinos, José Ramón León (SI-NC)
denunció que el Ejecutivo anterior dejó sin pagar una deuda que
supera los 500.000 euros, gastos realizados “irregularmente o
ilegalmente”, matizó, ya que se realizaron sin ningún tipo de
procedimiento ni contrato, “simplemente con facturas”.
Lo
hizo durante la rueda de prensa que ofreció junto con los portavoces
de los tres grupos que conforman el actual gobierno, Ramón Luis
Socas (PSOE), Isabel García (PP) y José Domingo Alonso (Cs), y
otros concejales presentes, para hacer balance de los primeros doce
meses de gestión.
En
nombre de todo el equipo, el alcalde reconoció que este tiempo “no
había estado exento de dificultades”, que sin embargo habían
fortalecido la unidad del grupo de gobierno para dar respuesta a los
problemas históricos del municipio y a las demandas de los
ciudadanos.
Uno
de los mayores inconvenientes a los que se tuvo que enfrentar fue la
falta de personal que se tradujo en una ralentización de la gestión.
Pese a ello, “se logró hacer funcionar el Ayuntamiento sin gran
perjuicio para la ciudadanía”, subrayó, al tiempo que anunció
que ayer mismo abían tomado posesión de su cargo el nuevo
interventor y secretario municipales.
Esta
carencia administrativa también provocó un retraso en la aprobación
de la cuenta de este año y obligó a contratar a una empresa para su
elaboración. Si se cumplen las previsiones, el nuevo documento
económico se aprobará en un pleno extraordinario que se celebrará
a finales de este mes o comienzos del próximo.
Lejos
de enfrentamientos internos y la falta de transparencia que según el
actual gobierno caracterizaba a CC, se ha intentado “retomar el
diálogo y el consenso con las distintas administraciones,
incrementar el nivel de ejecución del presupuesto, y recuperar la
inversión de forma cohesionada en el municipio”.
Entre
sus principales logros, los cuatro portavoces resaltaron la mejora en
los servicios públicos, fundamentalmente en el suministro de agua,
evitando los cortes que sufrieron los vecinos el verano anterior,
salvo por averías o reparaciones; en turismo y promoción del
municipio, con especial relevancia en el Parque del Drago, cuya
afluencia “ha aumentado considerablemente”, y la puesta en marcha
de la Zona Azul, una iniciativa bien recibida por vecinos y
comerciantes.
En
Fiestas, señalaron la “ecuanimidad” en todos los barrios, y
respecto a las celebraciones principales, manifestaron que se
organizaron con la mitad del dinero empleado por CC, se pagaron todos
los gastos y se contó con grupos y empresas locales.
También
se consiguió un compromiso con el Cabildo para que asuma el
saneamiento del Centro de Visitantes del Drago “bloqueado” por el
“empecinamiento” de Francis González y que el recinto pueda
abrir sus puertas. Otros proyectos importantes para la ciudad que se
lograron “destrabar” fueron la playa San Marcos, las viviendas de
Moreiro y el Centro Insular de las Tradiciones, que pese a su
“demagogia”, CC no destinó “un solo euro” en adquirir el
antiguo edificio de Unelco, que era la condición indispensable para
ejecutar la subvención insular.